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No usarás el nombre de Gloria en vano

Techi León en su libro "Un himno a la vida" mencionado en la entrada anterior, habla de los valores que Fathy Andrawis, fundador de la Escuela "El karnak" una de las primeras en España, transmitía. Uno de ellos es que  la modestia y la honestidad deben ser características inherente a la bailarina. Y así, es.

El título de esta entrada, no es accidental. He tenido la fortuna de poder recibir clases en la Escuela de Gloria Alba, otra de las grandes maestras con mayúsculas de la escena oriental en España y no sólo he asistido durante 6 cursos a su escuela sino que he tenido el gusto de recibir clase con ella todos los martes, de 20 a 21: 30 el primer año y de 20:30 a 21:30 los restantes. En esos 6 cursos, mas de 6 años, me han pasado todo tipo de cosas en términos dancísticos y personales, he sudado la gota gorda para seguir la clase en un grupo de nivel medio porque venía de un supuesto avanzado para acabar la clase en el grupo de iniciación para corregir vicios, que traía y muchos. He descubierto de dónde sale el movimiento, he aprendido a identificar su recorrido. Me he reído cuando crees que controlas algo y de repente se deja llevar y hace una filigrana y te quedas con la boca abierta porque pensabas que aquello era todo lo que podías aprendes y entonces ves que te queda mucho por delante y que el aprendizaje es constante y para todos, maestros y alumnos. He sentido su mano en el hombro para guiar mis pasos en un ensayo y he notado su abrazo para calmar mis nervios antes de salir al escenario y por eso me hace gracia, cuánta gente menciona su nombre en vano y se apunta el tanto de haber ido a sus clases, aunque no sea cierto.

Se coge antes a un mentiroso que a un cojo. Asistir a un taller en su escuela, no es dar clase con ella. Tampoco lo es, aunque hayas ido a un taller de verano, 2 horas con ella o a un taller de formación. No has sido alumna de ella. Saber quién es y decir, ah sí, la conozco he ido con ella y que luego se te vea el plumero tampoco es serio.

Tengo una compañera que asegura haber topado con otra alumna que afirma tener una titulación de la Escuela de Gloria, baste recordar que ella misma, recordó que no daba ningún certificado. Uno de los grandes problemas. No hay más certificado que pisar la arena del escenario. Que pasar calores, nervios, risas entre bambalinas en el San Juan, en el Ramiro, en la Galileo o dónde toque y descubrir de su mano cómo el movimiento se convierte en arte. Así que en el nombre de la danza y si le tienes algún respeto NO USES SU NOMBRE NI EL DE NINGUNA OTRA MAESTRA O MAESTRO EN VANO salvo que puedas decir orgullosa que has estado un tiempo formándote en su escuela. Seamos seri@s. Si no has pasado unos años por allí, tal vez deberías pensar en ir y no en decir que has ido. A las alumnas se les nota el sello del maestro.


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